Bailar y danzar son términos similares que se utilizan a menudo de manera intercambiable, pero hay algunas diferencias sutiles en su significado.

‘Bailar’ es un término más general que se refiere a cualquier tipo de movimiento corporal que se realiza en respuesta a la música, puede ser una actividad individual o grupal, y puede incluir una amplia variedad de estilos. Por otro lado, ‘Danzar’ se refiere a una forma más estructurada y formal de movimiento corporal que se realiza con una técnica específica y un vocabulario de movimiento definido. La danza a menudo se enfoca en la expresión artística y puede tener un significado simbólico o cultural específico. La danza también puede ser una actividad más profesional y se enseña en escuelas de danza y conservatorios, mientras que bailar puede ser una actividad más informal y practicada en una variedad de contextos, desde fiestas hasta clases de gimnasia.

La palabra «bailar» tiene una etimología incierta, aunque se cree que proviene del latín ‘battuĕre’«, que significa «golpear» o «sacudir». Esta teoría se basa en la idea de que el baile involucra movimientos rítmicos del cuerpo, que podrían interpretarse como una especie de «golpeteo» en respuesta a la música. Otra teoría sugiere que la palabra «bailar» puede tener raíces germánicas, derivadas de la palabra baggjan’, que significa «moverse bruscamente». Esta teoría sugiere que la palabra «bailar» podría haber evolucionado a partir de un término germánico que describía un tipo de danza folklórica que implicaba movimientos rápidos y bruscos del cuerpo. Sin embargo, la verdadera etimología de la palabra «bailar» sigue siendo un misterio y es objeto de debate entre los expertos en lingüística.

La palabra «danzar» proviene del latín «danciare«, que significa «bailar». Esta palabra latina a su vez deriva de «dare«, que significa «dar», y «decere«, que significa «ser apropiado o adecuado». Es interesante notar que la palabra «danza» en español y «danse» en francés también se derivan del verbo latino «danciare«. La palabra latina «danciare» se usaba para describir una amplia variedad de formas de baile en la época romana, incluyendo tanto danzas folklóricas como danzas cortesanas más formales. A medida que la danza se desarrolló y se diversificó en Europa durante la Edad Media y el Renacimiento, la palabra «danzar» se mantuvo como un término común para describir el acto de moverse en respuesta a la música. Hoy en día, la palabra «danzar» se usa comúnmente en español para describir cualquier tipo de danza, desde el ballet clásico hasta la salsa o el hip-hop. La palabra también se usa en otros idiomas europeos, como el italiano («danzare») y el portugués («dançar»), y ha evolucionado para describir una amplia variedad de estilos y técnicas de danza en todo el mundo.

En conclusión, mientras que ambos términos se refieren a la actividad de moverse en respuesta a la música, la danza implica una técnica y unas estructuras más específicas, mientras que bailar es una actividad más general y puede ser menos formal.