Descripción
A las cinco en punto comienza el rito, que no requiere de ensayos previos los días anteriores. El de mayor edad inicia el que llaman «el Caracol de recogida», formando un gran círculo donde se coloca a los congregados por edad, distanciados entre sí varios metros, de forma que el último —el más pequeño— acaba junto al mayor, al que suelen denominan «guía» o «pastor» («yo le llamo así porque le relaciono con el rebaño de ovejas; es él quien debe coger las ovejas y guiarlas por el pueblo», afirma Jorge García, de 22 años). Este «pastor» comienza a saltar, haciendo sonar sus cencerros, y el resto del grupo hace lo mismo, en el lugar asignado a cada uno. Tras un breve rato, el «guía» comienza dar la vuelta al redondel, sorteando a sus componentes —al primero por la derecha y al siguiente por la izquierda, y así sucesivamente—. Acabada la primera vuelta, se coloca, detrás del «guía», el segundo de edad, iniciando otro giro. Esta coreografía se repite tantas veces como miembros tenga el corro.