Descripción
Una pintura sobre un vaso ilicitano es de extraordinaria importancia para el tema que nos ocupa. Representa a una dama colocada de frente, vestida con chitón griego,
con el brazo derecho levantado en alto, de manera que casi toca el de su compañera, de la que se ha perdido el cuerpo, rodeada de animales, peces, aves y un conejo y de
rosetones. Esta figura se interpretó desde el primer momento como la imagen de una bailarina sagrada, rodeada de los símbolos de la gran diosa de la fertilidad, la Astarté de
los fenicios, la Tanit de los púnicos, diosa que contaba en Ilici con un templo a ella dedicado, como lo indica el semis con la inscripción IVNONI, la diosa romana equivalente a Tanit, sobre el arquitrabe de un templo. Los atributos que rodean a la bailarina, no se puede dudar de que la dama interpreta un paso de danza, ya que levanta los brazos
al igual que su compañera, son los mismos que acompañan a las imágenes de Tanit, en la cerámica ilicitana de época helenística. Tendríamos, pues, una representación de la dama efectuando un ritual en honor de la gran diosa de la fertilidad semita, bien se llame Astarté o Tanit.