Descripción
Entendiendo que el movimiento es el indicador de una dinámica en la que descansa lo urbano, su práctica como protocolo está acoplada a una lógica coreográfica desde sus componentes y desde la estructura que forman sus relaciones. Desde la particular mirada de la coreología se ofrece esta reflexión sobre la participación del cuerpo como epicentro de una dinámica urbana que deviene danza en sus recorridos.